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Medición de la fuerza del pedal automotriz
Medición de la fuerza del pedal automotriz

En el ámbito del desarrollo automotriz, la medición precisa y repetible de la fuerza aplicada sobre los pedales de un vehículo es un proceso clave para asegurar el rendimiento, la seguridad y la experiencia del conductor. Los pedales de freno, acelerador y embrague actúan como puntos de interacción directa entre el conductor y el sistema del vehículo, por lo que su comportamiento debe ser predecible, uniforme y cómodo. En este contexto, evaluar la fuerza necesaria para accionar cada pedal permite validar que el esfuerzo requerido se mantenga dentro de rangos seguros, sin comprometer la ergonomía ni el control del vehículo.

Particularmente en los pedales de freno, una medición exacta permite verificar que la fuerza del conductor se traduzca en una respuesta hidráulica o electrónica efectiva, asegurando así una distancia de frenado adecuada y una sensación de firmeza y control. Esta consistencia también es vital en los pedales de aceleración y embrague, donde pequeñas variaciones pueden alterar la suavidad de conducción y la confianza del usuario. En los vehículos eléctricos, híbridos y con funciones avanzadas de asistencia a la conducción (ADAS), la exigencia sobre la precisión del pedal es aún mayor debido a la digitalización de la respuesta del sistema.

LCS ofrece soluciones especializadas para medir la fuerza del pedal en pruebas automotrices, tanto en laboratorios de I+D como en condiciones reales de carretera. Sus sensores de fuerza, basados en tecnología de galgas extensométricas, presentan un diseño compacto y resistente, capaces de adaptarse a diferentes configuraciones mecánicas del pedal mediante soportes personalizados. Los transductores LCS están disponibles con múltiples salidas eléctricas —incluyendo mV/V, 0–10V y 4–20mA— compatibles con la mayoría de sistemas de adquisición de datos usados en la industria.

Además, LCS permite la personalización de parámetros clave como el rango de fuerza, la geometría del sensor, la resistencia ambiental (protección IP) y la compensación térmica, lo que garantiza una integración eficiente en cualquier banco de pruebas o vehículo prototipo. Estas soluciones son ideales para fabricantes de vehículos, proveedores Tier 1 y laboratorios de ensayo que buscan garantizar la calidad, el cumplimiento normativo y la comodidad del conductor. Gracias a la tecnología de medición de fuerza de LCS, es posible optimizar con precisión la respuesta de los pedales, logrando una interfaz más segura y refinada entre el vehículo y su conductor.